Espejos

Debo admitir que me fascinan los espejos. Antes de que me critiquen o acusen de ser narcisista, debo aclarar que lo que me atrae de los espejos es la función que tienen en esta vida.

Un espejo no es un objeto de vanidad sino una herramienta que permite conocernos y entender el camino que hemos recorrido. Ver nuestras arrugas, facciones y rasgos nos permite entender la forma en la cual hemos madurado y la manera en la cual nos perciben otras personas.

Recuerdo que hace muchos años quise distanciarme de la imagen reflejada por los espejos. De niño pensaba que si miraba un espejo por horas iba a ser posible hacerlo cometer un error y descubrir al impostor que se encontraba tras la imagen reflejada.

Aunque nunca logré aquel objetivo, debo confesar que ya ha habido varios momentos en los cuales no he reconocido la imagen que veo en el espejo. Conocerse a sí mismo es muy difícil y también lo es el entender la imagen que proyectamos ante el mundo.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s