Acabo de ver «Fair Game», una película cuya trama me hizo recordar a Adolfo Aguilar Zinser y me inspiró a escribir este post. Aunque admito que no sé mucho de política, debo decir que este político mexicano es (era) uno de los pocos que admiro y respeto.
Adolfo Aguilar Zinser es recordado por la mayoría de los mexicanos como el autor de la frase “México es el patio trasero de Estados Unidos”. A pesar de ser recordado por esta frase, el verdadero logro de este político fue lograr que la ONU no aprobara la guerra de Estados Unidos contra Irak.
En palabras del Economist:
“As one of the ten non-permanent members of the Security Council, Mexico had some weight; with Mr Aguilar Zinser, it gained more. Five other countries joined him to resist American arm-twisting, and the United States was eventually obliged to abandon hope of a second resolution”.
“He became the very model of an intellectual typified by Mexico’s great poet, Octavio Paz: not merely observing and commenting from some ivory tower, but fighting in the thick of things”.
Educado en Harvard, académico, político y columnista. Aguilar Zinser era un personaje que a pesar de tener muchos roles y ser imperfecto como todos los seres humanos, al menos era coherente y decía aquello que pensaba. En un mundo dónde las personas viven bajo incentivos en lugar de principios, creo que es importante tener más políticos como este individuo. Personas que tomen la decisión correcta y que cuestionen el poder aunque esto traiga consigo un costo para la persona que se atreve a sacudir el estatus quo.
Aguilar Zinser es criticado por llevar una política personal ante las Naciones Unidas. No obstante, si la mayoría de los mexicanos y países se oponían a la misma… ¿Por qué era tan difícil que un individuo levantara la voz e hiciera lo que es correcto?
Creo que el mejor homenaje que se le puede hacer a Aguilar Zinser es la última línea que The Economist escribió en su obituario…
“One thing, however, gave him comfort. Mr Fox might play the subservient, suppliant ally. But as long as Mr Aguilar Zinser had been at the UN, no member of the Security Council had thought of Mexico as anyone’s back yard”.